Normandía, una región histórica situada en el noroeste de Francia, es famosa por su rica herencia, paisajes impresionantes y playas emblemáticas. Su historia se entrelaza con eventos cruciales como la conquista normanda de Inglaterra en 1066 y el desembarco del Día D durante la Segunda Guerra Mundial. La región alberga pintorescas ciudades como Rouen, con su catedral gótica, y Mont Saint-Michel, una majestuosa abadía en una isla rocosa. Además, Normandía esconde otras muchas cosas que ver, los visitantes pueden disfrutar de la costa, los campos de batalla y museos, que ofrecen una mirada profunda a su fascinante pasado y belleza natural.
Localización de Normandía
20 Lugares recomendados que ver en Normandía
1. Etretat, un lugar recomendado que ver en Normandía.
Este encantador destino es famoso por sus impresionantes acantilados de tiza blanca, que se elevan majestuosamente sobre el mar. Las formaciones rocosas más emblemáticas son la «Aiguille» (la aguja) y el «Arche» (el arco), que han inspirado a numerosos artistas, incluyendo al pintor Claude Monet y al escritor Maurice Leblanc, creador de Arsène Lupin.
Además de sus paisajes naturales, Étretat ofrece una rica herencia cultural. El pueblo cuenta con una arquitectura tradicional normanda, con casas de entramado de madera y calles adoquinadas. Los visitantes pueden explorar el Jardín de Étretat, un parque artístico que combina esculturas contemporáneas con la belleza natural del entorno.
Étretat es también un lugar ideal para los amantes del senderismo, con varias rutas que ofrecen vistas panorámicas del mar y los acantilados.
2. El Monte Saint-Michel, otro lugar imprescindible que ver en Normandía.
El Monte Saint-Michel es una de las joyas más icónicas de Normandía y de toda Francia. Este islote rocoso, situado en la desembocadura del río Couesnon, se eleva majestuosamente desde las aguas de la bahía que lleva su nombre. Con una historia que se remonta al siglo VIII, cuando se construyó un santuario en honor al arcángel San Miguel, el Monte Saint-Michel ha sido un importante centro de peregrinación durante siglos.
La arquitectura del Monte Saint-Michel es una fascinante mezcla de estilos medievales. La impresionante abadía benedictina en la cima es el punto culminante, ofreciendo una vista panorámica sobre la bahía y sus mareas dramáticas, que pueden variar hasta 15 metros. Las calles estrechas y empinadas que conducen a la abadía están llenas de tiendas, restaurantes y casas que datan de la Edad Media, proporcionando una experiencia de viaje en el tiempo.
Además de su importancia religiosa e histórica, el Monte Saint-Michel es conocido por sus mareas extremas, que lo convierten en una isla durante la marea alta y en parte del continente durante la marea baja. Este fenómeno natural único ha protegido históricamente el sitio de invasiones y ha añadido a su mística y atractivo turístico.
Hoy en día, el Monte Saint-Michel es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO y atrae a millones de visitantes de todo el mundo.
3. Rouen
Es la capital de la región de Normandía, destacando por sus casas con paredes de entramado y sus callejuelas.
4. Caen, un pueblo recomendado que ver en Normandía.
Caen es conocida por su rica herencia y su papel crucial en la Segunda Guerra Mundial. Fundada en el siglo XI por Guillermo el Conquistador, alberga monumentos como el Castillo de Caen y las abadías de los Hombres y las Mujeres. Durante la Segunda Guerra Mundial, Caen fue escenario de intensos combates durante la Batalla de Normandía. Hoy, el Memorial de Caen honra este pasado bélico. La ciudad combina historia y modernidad, con museos, jardines y una vibrante vida cultural, siendo un destino imprescindible que ver en Normandía.
5. La Pointe du Hoc
Se trata de una antigua batería alemana de cañones de 155 mm situados sobre un acantilado a 30 m de altura sobre el nivel del mar. En este terreno se libró una de las más decisivas batallas entre los rangers americanos y los soldados alemanes, viéndose los primeros enormemente reducidos. Los impactos de la artillería aliada son claramente visibles habiendo dejado cráteres durante los bombardeos previos al asalto ranger.
6. Les Andelys
La ciudad es conocida por su impresionante castillo, el Château Gaillard, una fortaleza medieval construida en el siglo XII por Ricardo Corazón de León. Este castillo ofrece vistas panorámicas del río y el valle, atrayendo a numerosos visitantes cada año.
Les Andelys está dividida en dos partes: el Grand Andely y el Petit Andely. El Grand Andely es el núcleo comercial y administrativo, mientras que el Petit Andely, más cerca del río, destaca por sus pintorescas casas antiguas y calles adoquinadas. Entre sus atracciones se encuentran la colegiata de Nuestra Señora, un hermoso ejemplo de arquitectura gótica, y el Museo Nicolas Poussin, dedicado al famoso pintor barroco nacido en la ciudad.
Además de su rica historia y patrimonio arquitectónico, Les Andelys ofrece actividades al aire libre como paseos en barco por el Sena, senderismo y ciclismo en los alrededores.
7. Playas del Desembarco, un lugar histórico que ver en Normandía.
Estas playas situadas en la península de Cotentín fueron objeto del desembarco de Normandía (Operación Neptuno) el 6 de junio de 1944 siendo el lugar de desembarco de las tropas aliadas durante la operación Overlord en el famoso día D. Las 5 playas del desembarco fueron:
- Sword beach
- Gold beach
- Utah beach
- Omaha beach
- Juno beach
Actualmente son playas tranquilas donde quedan innumerables restos de bunkers, restos del puerto artificial, monumentos y carros de combate de la época.
8. Vernon
Es un pequeño pueblo en el cual, en uno de sus márgenes, muy cerca el uno del otro podemos ver el antiguo molino situado junto al rio y a escasos metros el castillo de Tourelles.
9. Honfleur, otro bonito pueblo que ver en Normandía.
Honfleur es una pintoresca ciudad portuaria en la desembocadura del río Sena. Conocida por su encantador puerto viejo, el Vieux Bassin, Honfleur ha sido una fuente de inspiración para numerosos artistas, incluidos los impresionistas como Claude Monet y Eugène Boudin. Sus calles adoquinadas y casas con fachadas de madera y pizarra crean un ambiente acogedor y nostálgico.
Además de su riqueza cultural y artística, Honfleur es famosa por su gastronomía, especialmente los mariscos frescos y productos locales. Sus restaurantes y cafés a orillas del puerto son lugares perfectos para disfrutar de la cocina normanda tradicional.
10. Dieppe
Contiene un puerto pesquero y marítimo muy importante, situándose en la costa de Alabastro. En los alrededores se encuentran unos bellos acantilados que van avanzando con el paso del tiempo.
11. Alençon
Es la capital del departamento de Orme. Entre sus monumentos a ver están el almacén del trigo, el ayuntamiento o su castillo de los Duques.
12. Cementerio de La Cambe
Es uno de los mayores cementerios militares alemanes de la Segunda Guerra Mundial. Inaugurado en 1947, alberga los restos de más de 21,000 soldados alemanes caídos durante la Batalla de Normandía, en el verano de 1944.
El cementerio es un lugar de sobria reflexión, con cruces de piedra negra y un túmulo central coronado por una cruz y dos figuras simbólicas. Administrado por el Volksbund Deutsche Kriegsgräberfürsorge, el cementerio busca recordar las tragedias de la guerra y promover la reconciliación y la paz. Cada año, atrae a numerosos visitantes y familiares de los soldados, así como a historiadores y turistas interesados en la historia de la Segunda Guerra Mundial.
13. Le Havre
Está situada en la orilla derecha del estuario del rio Sena, a orillas del canal de la Mancha. Es una ciudad que entremezcla una arquitectura clásica con otra moderna como el centro cultural diseñado por el arquitecto Oscar Niemeyer.
14. Cementerio Americano de Colleville-sur-Mer, un imprescindible que ver en Normandía para los amantes de la historia.
Es un inmenso cementerio y memorial de la Segunda Guerra Mundial localizado en un barranco mirando hacia la playa de Omaha. Cubre 70 hectáreas y contiene los restos de 9389 militares estadounidenses.
15. Reserva natural de Beauguillot
La Reserva Natural de Beauguillot es un hermoso y protegido humedal ubicado en la región de Normandía, en Francia. Este importante santuario de aves alberga una amplia variedad de especies migratorias y aves acuáticas, lo que lo convierte en un lugar destacado para la observación de aves.
Beauguillot es conocido por sus impresionantes paisajes de marismas, canales y lagunas, que son el hábitat perfecto para aves como el ánsar común, la espátula común y el correlimos zarapitín. Los observadores de aves y amantes de la naturaleza disfrutan de este entorno tranquilo y la oportunidad de presenciar la biodiversidad única de la región.
16. Abadía de Jumieges
Es una impresionante abadía benedictina fundada en el siglo VII, esta abadía es un destacado ejemplo de la arquitectura románica y gótica. Sus majestuosas ruinas, que incluyen imponentes arcos y columnas, son un testimonio de su antigua grandeza y a menudo se la describe como la «joya de Normandía».
La abadía fue un importante centro religioso y cultural durante la Edad Media y atrajo a monjes y eruditos de toda Europa.
17. Le Tréport
Le Tréport, un encantador puerto pesquero en Normandía, destaca por su impresionante combinación de acantilados de tiza blanca y playas de guijarros. Situado en la desembocadura del río Bresle, este pintoresco pueblo ofrece un ambiente auténtico con sus coloridas casas y el bullicio del mercado de pescado. Entre las atracciones principales se encuentran el funicular que sube a los acantilados, proporcionando vistas panorámicas espectaculares, y la iglesia de Saint-Jacques, con su arquitectura gótica.
18. Basílica de Santa Teresa, Lisieux
Es una iglesia católica y una basílica menor dedicada a Santa Teresa de Lisieux. Está puede alojar a 4000 personas y tiene más de dos millones de visitantes al año, siendo el segundo lugar de peregrinación más visitado de Francia, después de Lourdes.
19. Museo de los autómatas, Falaise
Poseen una colección de más de 300 autómatas animados que se exhibían para las fiestas navideñas en los escaparates de los grandes almacenes parisinos.
20. Casa de Claude Monet en Giverny, un último recomendado que ver en Normandía.
Este lugar icónico fue donde Monet vivió y trabajó durante más de cuatro décadas y donde creó muchas de sus obras maestras, incluyendo los famosos nenúfares. La casa y sus hermosos jardines, llenos de flores y estanques de agua, sirvieron como fuente de inspiración para muchas de sus pinturas. Hoy en día, la Casa y los Jardines de Monet son una atracción turística importante, donde los visitantes pueden explorar el entorno que inspiró al artista y disfrutar de la belleza natural que tanto amaba.
Donde dormir en Normandía
Más abajo los mejores hoteles donde dormir en Normandía
Booking.comQué comer en Normandía
La región de Normandía ofrece una rica y variada gastronomía que combina ingredientes frescos de la tierra y el mar. Algunos platos y alimentos que no debes perderte al visitar Normandía incluyen:
- Quesos: Normandía es famosa por su producción de quesos, como el Camembert, el Pont-l’Évêque y el Livarot, todos ellos con sabores distintivos y deliciosos.
- Manzanas: Esta región es conocida por sus manzanas y productos de sidra. Prueba la sidra local, el calvados (un aguardiente de manzana) y las tartas de manzana.
- Moules Marinières: Mejillones cocinados en vino blanco con ajo y perejil, una delicia marinera.
- Crepes y Galettes: Al igual que en otras partes de Francia, en Normandía puedes disfrutar de crepes dulces y galettes saladas rellenas de una variedad de ingredientes.
- Platos de Pescado: Normandía ofrece una abundancia de pescados y mariscos frescos. Prueba el «bar au beurre blanc» (lubina en salsa de mantequilla) o el «coquilles Saint-Jacques» (vieiras).
- Cordero de Salé: El cordero de salé, una raza de oveja local, es conocido por su carne tierna y sabrosa, a menudo cocinada con hierbas y vino.
- Tarta Tatín: Este postre consiste en manzanas caramelizadas en azúcar y mantequilla, horneadas bajo una capa de masa.
- Platos de Crema: Normandía es famosa por sus platos de crema, como el «potage à la crème» (sopa de crema) y el «coq au vin jaune» (pollo en salsa de vino amarillo y crema).